Un almacén particular de Aduana es una figura importante para las empresas que importan o exportan mercancías desde Chile. Estos recintos permiten almacenar productos bajo control fiscal sin pagar inmediatamente los impuestos, lo que resulta especialmente útil cuando se solicita una admisión temporal.
Para respaldar este tipo de operaciones, el seguro de almacén particular garantiza el cumplimiento de las obligaciones tributarias ante el Servicio Nacional de Aduanas.
Este instrumento permite aplazar pagos, liberar capacidad financiera y mantener el cumplimiento normativo sin complicaciones bancarias.
¿Qué es un almacén particular?
Un almacén particular es una instalación privada autorizada por Aduanas para custodiar mercancías extranjeras o nacionales de forma temporal. Funciona como un recinto fiscalizado donde los productos se resguardan hasta que se complete su proceso de importación definitiva o exportación.
Este tipo de espacio es fundamental para operaciones logísticas que requieren tiempo adicional para distribución, venta o tramitación tributaria.
Almacén particular: definición y tipos
Desde la normativa chilena, contempla dos modalidades:
- Almacén particular de importación: se utiliza para almacenar bienes extranjeros que aún no se han nacionalizado. Permite diferir el pago del IVA y otros derechos aduaneros.
- Almacén particular de exportación: sirve para guardar temporalmente productos nacionales antes de ser enviados al extranjero, manteniéndolos bajo vigilancia fiscal.
Ambos operan bajo autorización expresa y normas estrictas del Servicio Nacional de Aduanas.
Requisitos para operar un almacén particular de Aduana
Para que un recinto pueda funcionar como almacén particular, debe contar con la autorización expresa del Servicio Nacional de Aduanas. Esta autorización se otorga a instalaciones privadas que cumplan con las condiciones técnicas y administrativas exigidas por la normativa vigente.
Los requisitos generales incluyen:
- Resolución aprobatoria emitida por Aduanas.
- Infraestructura cerrada y delimitada, con acceso controlado.
- Señalización adecuada y zonas específicas para diferentes tipos de mercancía.
- Sistema de registro y control de ingresos y salidas de productos.
- Responsables técnicos y administrativos identificados.
- Contrato de seguros vigente, cuando corresponda.
Estos requisitos aseguran que las mercancías se mantengan bajo control fiscal durante su estadía y que se respete la trazabilidad exigida por las autoridades.
Diferencias entre almacén particular, fiscal y extraportuario
En Chile existen distintas figuras legales para almacenar mercancías bajo supervisión aduanera. A continuación, se resumen las principales diferencias:
- El almacén particular ofrece flexibilidad para empresas que necesitan posponer pagos tributarios, a cambio de una póliza de garantía.
- El almacén fiscal es operado directamente por Aduanas y no permite postergación de pagos.
- El almacén extraportuario funciona en zonas habilitadas para operaciones logísticas cercanas a puertos o aeropuertos.
¿Qué es el seguro de almacén particular?
Es una póliza que garantiza el pago de impuestos y derechos aduaneros en caso de incumplimiento por parte del importador o exportador. Su objetivo no es cubrir pérdidas materiales, sino asegurar al Estado que se recibirán los tributos correspondientes, aun si la empresa no cumple.
Esta póliza es útil cuando se solicita una admisión temporal, ya que permite mantener la mercancía en el país sin nacionalizarla por un tiempo definido.
¿Cómo se contrata este seguro?
- La empresa solicita la emisión del seguro ante AVLA u otra compañía autorizada.
- La póliza se entrega al Servicio Nacional de Aduanas como garantía.
- La carga puede ingresar y permanecer en el almacén temporal sin el pago inmediato de tributos.
Esta herramienta financiera evita el uso de boletas bancarias, liberando recursos para capital de trabajo u otras inversiones.
¿Qué cubren los seguros para almacenes?
Existen dos tipos de seguros relevantes:
- Seguro almacén (aduanero): garantiza el cumplimiento de obligaciones tributarias ante Aduanas.
- Seguros para bodegas y almacenes: protegen físicamente las mercancías almacenadas ante riesgos como incendios, robos o daños climáticos.
Ambos pueden contratarse de manera complementaria. Mientras uno actúa como respaldo fiscal, el otro resguarda el valor económico del inventario durante el almacenamiento.
Normativa chilena que regula los almacenes particulares
El uso de almacenes particulares y su relación con las garantías exigidas por Aduanas está regulado por un marco normativo claro. Algunas de las principales normativas aplicables son:
- Ley N° 18.525 sobre medidas de fomento a las exportaciones: regula el uso de mecanismos de admisión temporal y exención de tributos para fomentar el comercio exterior.
- Reglamento sobre Almacenes Particulares del Servicio Nacional de Aduanas (Resolución N° 1.837/1998 y posteriores): establece los requisitos técnicos, operativos y de control para su funcionamiento.
- Oficios y circulares del SNA actualizados que regulan la vigencia y formato de pólizas de seguro como alternativa a boletas bancarias.
Estas normas aseguran que el proceso de admisión, almacenamiento y nacionalización de mercancías siga un protocolo fiscal seguro y estandarizado.
¿Por qué contratar un seguro para almacenes?
Utilizar seguros especializados reduce riesgos financieros, operativos y legales. Las empresas que trabajan con almacenes particulares de Aduana deben cumplir con exigencias específicas, y contar con pólizas de garantías confiables agiliza los procesos.
Además, al reemplazar las garantías bancarias por una póliza, se libera capacidad de endeudamiento que puede usarse de forma más estratégica.
¿Quieres asegurar tus operaciones en un almacén temporal sin comprometer tu liquidez? Contrata hoy tu seguro de almacén en AVLA con respaldo técnico y emisión ágil.
